TEXTO PABLO RUSSO
FOTOGRAFÍAS SALTIMBANQUIS
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«Está muy bueno generar contextos de encuentro en presencia para les niñes, con instancias de formación y recreación, de contacto con el arte», sostiene el saltimbanqui Carlos Vicentín. Este fin de semana habrá dos momentos específicos en los que gurises y gurisas podrán jugar, disfrutar y reflexionar a través de propuestas culturales para las infancias. El espectáculo teatral La Carrindanga se presenta el sábado 8 y domingo 9 en la sala Saltimbanquis (Feñiciano 546), a las 17, con modalidad a la gorra y una actividad lúdica.
«Como lo hacían los viejos saltimbanquis, este espectáculo está conformado en base a actividades breves que en su mayoría incluyen la participación del público infantil, como así también, el rescate cultural de nuestra historia y la puesta en valor de las riquezas de nuestro amado litoral. En el devenir de la escena, compartiremos cuentos, juegos de palabras, títeres, canciones, máscaras, leyendas, entre otros recursos que apelan a un clima de juego, reflexión y experiencia en un ambiente dominado por la sensibilidad y la amorosidad», informan desde el Colectivo Artístico Saltimbanquis. En La Carrindanga actúan Gabriela Vieiro, Clarisa Benetti, Jimena González y Carlos Vicentín, quien además tiene a cargo la dirección general. El equipo técnico se completa con Sol Andreina González en iluminación y vestuario, José Luis Ferreira en la ambientación musical, Pola Ortiz en Títeres, Darío «Chicho» Ocaranza en máscaras y Elina Aguilar en recursos plásticos.
La Carrindanga es un espectáculo «muy de la pandemia, tiene mucho de esa impronta», define Carlos Vicentín. «Lo armamos el año pasado en los momentos que podíamos y con las intermitencias del caso, y así llegamos a estrenarlo con el apoyo del Instituto Nacional del Teatro, virtualmente y luego cuando habilitaron de manera presencial», detalla. El resultado, sostiene el director, es una especie de homenaje a los viejos saltimbanquis, ambientado en el litoral en cuanto a región, historia, geografía. Para esto se utilizan diferentes recursos como títeres, máscaras, mímicas, representación de historias, trabajan con cuentos, leyendas y canciones, además de actividades lúdicas relacionadas con la palabra. «Es bien variadito y tiene un clima, una energía muy tranquila, para la diversión y para la reflexión», anuncia Vicente.
En cuanto a la participación del público infantil, en este caso no trabajan con el acercamiento y el contacto, sino que tiene más que ver con cantar una canción o acertijos de palabras. «Les niñes se cuidan muchísimo, a veces con más conciencia y responsabilidad que los mayores», dice Vicente, y agrega que «ojalá vuelvan los abrazos, las corridas, gritando y cantando todo el tiempo, eso se extraña mucho, la falta de contacto, no verse el rostro; pero también somos conscientes del momento que pasamos».
Por protocolo y para organizar el espacio -los cupos son muy limitados-, es necesario la reserva previa a través de redes sociales de Saltimbanquis o al +549-3455-469578.