El Consejo Provincial de Cultura busca afianzarse

TEXTO PABLO RUSSO

FOTOGRAFÍAS HONORABLE CÁMARA DE DIPUTADOS

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El Consejo Provincial de Cultura es una herramienta generada por la gestión provincial para potenciar ideas en todo el territorio. En estos días avanzó el tratamiento del proyecto de ley en la Honorable Cámara de Diputados de Entre Ríos, que busca afianzar ese organismo interjurisdiccional y consultivo, con el objetivo de que perdure en el tiempo.

La Comisión de Turismo y Cultura, presidida por el diputado Mariano Rebord, se reunió para trabajar sobre la iniciativa presentada por el diputado Gustavo Zavallo (Bloque Frente Justicialista CREER Entre Ríos). De ese encuentro virtual participaron la secretaria de Cultura, Francisca D’Agostino, y el director de Diversidad y Formación Cultural, Federico Prieto.

«Al Concejo lo creamos apenas asumí en enero de 2020; es un órgano interjurisdiccional consultivo de concentración, acuerdo y planificación de políticas culturales», le explica Francisca D´Agostino a 170 Escalones. El órgano está respaldado por el decreto 1549/20 que le otorga dependencia directa a su secretaría. Lo conforman la Secretaría de Cultura y todas las áreas de cultura de las municipalidades, sean secretarías, direcciones o coordinaciones de cultura. «La idea es trabajar en conjunto políticas públicas consensuadas en los territorios por las municipalidades a partir de las necesidades que ellas ven», aclara D´Agostino. El impulso de darle un marco de ley tiene que ver con su trascendencia, que quede formado «más allá de quien esté en el cargo», dice la funcionaria.

La modalidad de trabajo es de reuniones mensuales con los directores y directoras de cultura de cada localidad con el fin de fortalecer esas áreas, ayudarlos a armar proyectos, a que tejan redes entre ciudades y pueblos cercanos para potenciar las áreas, y analizar y debatir cuestiones referentes a la organización o estrategias de actividades culturales. «También generar instancias de formación y capacitación, estamos dando con ellos clases sobre gestión cultural específicamente para los miembros del concejo que son los directores, secretarios o coordinadores de cada municipio», indica D´Agostino. Las reuniones pueden ser plenarias o departamentales, en las que también se pueden ampliar con la convocatoria a algún sector de la comunidad, disciplina específica u otro organismo estatal, como por ejemplo Museos, para que exista intercambio y articulación de trabajo.

«Surgen cosas creativas», destaca Federico Prieto, quien está actualmente coordinando el organismo. «Costó hacer entender de qué va, como también sensibilizar sobre qué cosas atender de las políticas culturales, pensando la cultura en tres dimensiones: desarrollo económico; cohesión social desde los derechos a la producción y el acceso; y valor estético creativo», agrega. Desde la conformación del organismo, comenzaron a surgir proyectos en común, por región o por afinidad. Lo que subyace detrás de esta articulación es cambiar la lógica de «qué hay para llevar a mi pueblo» por una que sea «estoy en este proyecto, cómo me pueden ayudar».