En el lado oeste de la ciudad desemboca la cloaca sobre el río Paraná. El caño maestro cursa la línea debajo del camino que nace en el basural a cielo abierto conocido como «Volcadero». Luego de recorrer algunos kilómetros se encuentra con el curso líquido, sin ningún tratamiento de los desechos, cerca de los ranchos de los pescadores. El mal olor impregna el aire de los alrededores y, por estos días, la bajante deja expuesta la salida del material descartado por los inodoros de la ciudad.
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