.
En una esquina de la plaza Elio Leyes apareció este esténcil a dos colores estampado en los últimos días, advirtiendo del potencial peligro que corremos en Paraná ante un eventual accidente nuclear en la central de Atucha, ubicada, como indica el mensaje, a 278 kilómetros. La pintada se replica en otros puntos de la ciudad, cerca del río y en paradas céntricas del trasporte público de pasajeros, con las huellas de los pies siempre orientadas en dirección a Lima, Buenos Aires, sede de estas plantas nucleares. Además de la distancia, el esténcil informa en cuantas horas (13) llegaría la radiación hasta la capital entrerriana.
La acción fue una iniciativa de la agrupación Our Voice en el contexto de un evento virtual a nivel mundial titulado «Amenaza nuclear», que se realizó en el aniversario del accidente en Chernobyl, y del cual también participaron sobrevivientes de Fukushima. La invitación al encuentro se promocionó con afiches que contenían un código Qr, pegados cerca de los esténciles. Si bien la iniciativa primaria por la que fueron realizados ya pasó, quedan los rastros así como el riesgo latente.
.
.