El (nuevo) Monolito de la Memoria

TEXTO Y FOTOGRAFÍAS PABLO RUSSO

 

 

La placa que recuerda con sus nombres tallados a las desaparecidas y los desaparecidos en Entre Ríos durante la última dictadura cívico militar, ubicada en la plaza Alvear sobre calle Laprida, ha sido reacondicionada y reinaugurada en la tarde del miércoles 28 de mayo en un acto del que participaron la intendenta municipal, Rosario Romero, junto a un centenar de personas entre las que se destacaban reconocidos militantes de Paraná por los derechos humanos. El acto fue impulsado por la Secretaría de Cultura, Educación y Convivencia Ciudadana de la Municipalidad junto a La Solapa y familiares de víctimas.

 

 

En ese mármol, que con el tiempo se convirtió en el destino final de las marchas por Memoria, Verdad y Justicia del 24 de marzo, desde hacía años que ya no se alcanzaban a leer estos nombres, difuminados con el desgaste de los años al punto tal que el cacho de piedra había sido intervenido con aerosoles en otras manifestaciones. Ahora, además de una lectura clara, la lista ha sido actualizada con compañeros y compañeras que no figuraban originalmente, por lo que el listado asciende a 303 entrerrianos y entrerrianas.

Su historia se remonta a los años noventa, cuando imperaba el olvido y el silencio menemista -con sus políticas de indultos a genocidas- que tenía su expresión local en el intendente peronista Mario Moine. La primera versión de la placa se colocó en la plaza de 1° de Mayo y el jefe de gobierno de la ciudad la mandó a retirar al otro día, quebrándola en ese acto. Un grupo de integrantes de La Solapa recordaba ayer la vigilancia nocturna que habían realizado para cuidarla, y cómo los funcionarios municipales de entonces esperaron que la guardia baje para sacarla. Siguió entonces un tiempo signado por la burocracia negacionista, hasta que los organismos de derechos humanos lograron la instalación en la plaza Alvear en 1992, sitio de su emplazamiento actual. Este fue el primer recordatorio de la provincia en relación al terrorismo de Estado.

 

 

Ahora, el mármol ha sido puesto en valor también en su base y lo acompañan una señalética que recuerda el número de ordenanza (7461/1992) con el slogan «Por la paz y la convivencia democrática». El mármol, en cambio, está encabezado por la frase «No olvidaremos, no perdonaremos». Además, hay un QR para acceder -vía tecnología móvil- a la información sobre el Monolito de la Memoria Plaza Alvear. «Este listado no solo es un homenaje a las víctimas, sino también un recordatorio perpetuo de las atrocidades cometidas, que busca sensibilizar a la sociedad sobre la importancia de la memoria colectiva. La inscripción de sus nombres representa la visibilidad de quienes fueron silenciados y la urgencia de seguir luchando por la verdad y la justicia», dice en el micrositio. El Estado municipal reafirmó en este simbólico acto su compromiso con la memoria histórica y la lucha contra el terrorismo de Estado. «La existencia del Monolito de la Memoria invita a la ciudadanía a confrontar el pasado y a trabajar hacia un futuro donde la dignidad humana sea respetada y protegida, para una convivencia Democrática en Paz», afirma la Municipalidad en su página web.

 

 

 

 

 

Comparte:

te puede interesar

Scroll al inicio