TEXTO FRANCO GIORDA
FOTOGRAFÍAS BIBLIOTECA POPULAR DEL PARANÁ
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Luego de varios años de deterioro edilicio y de numerosas gestiones para su recuperación, se conoció recientemente que la Biblioteca Popular del Paraná, declarada Monumento Histórico Nacional, será restaurada a partir de un proyecto que contempla la intervención en todos sus sectores y la renovación de sus instalaciones.
En este sentido, el Ministerio de Obras Públicas de la Nación dio a conocer la Resolución 52/2021 que autoriza el llamado a licitación para la ejecución de los trabajos de refacción del inmueble de gran valor patrimonial, ubicado en calle Buenos Aires 256, en la zona céntrica de la capital entrerriana.
Según la información oficial, la protección y puesta en valor del edificio, inaugurado en 1910, contempla la conservación de los elementos y el lenguaje arquitectónicos. También se prevén obras para optimizar su funcionamiento. La mayor atención estará puesta sobre dos áreas: la sala de lectura y el salón de actos. A su vez, se acondicionarán los espacios menores de la planta baja para conferencias, exposiciones y talleres. El presupuesto para la obra supera los 115 millones de pesos.
Iván Brizuela, presidente de la Comisión Directiva de la entidad, indicó a 170 Escalones que «entre otras cuestiones, se incluye la renovación de los servicios sanitarios, como cloaca y desagües, eléctricos, de calefacción y de refrigeración. Se restauran las fachadas, pisos y muebles históricos. Se agrega nuevo mobiliario para el guardado de libros. Se amplía la boca del escenario del salón auditorio para recibir espectáculos de mayor envergadura. Se coloca un ascensor para doce personas. Se hacen baños nuevos para hombres y mujeres y para acceso con silla de ruedas en las dos plantas del edificio. Se agrega un pequeño anfiteatro en el patio exterior del fondo, un sector que hoy no es accesible al público; esto implica ventanales hacia un espacio con verde desde la sala de lectura».
Consultado específicamente sobre el notable salón de la planta alta, sostuvo que «quedará habilitado, aun cuando algunas inversiones puedan quedar pendientes para etapas futuras, como la colocación de equipamiento de aire acondicionado o de proyectores y pantallas para cine».
Derrotero
Brizuela también compartió con este medio una síntesis que destaca los hitos en el largo camino recorrido por la institución para la recuperación de su edificio. Así es que en 2006 fue declarado Monumento Histórico Nacional por el Congreso Nacional a través de la ley 26.116; al respecto, hay un antecedente de 1987 cuando el proyecto de declaratoria fue aprobado por una sola de las cámaras legislativas. En 2009 se firmó un acuerdo de reparación histórica entre la presidencia de la Nación y el gobierno de Entre Ríos en el que fue seleccionada la Biblioteca para restaurarse con motivo de los festejos del Bicentenario de la Revolución de Mayo; en este sentido, cabe resaltar que el inmueble fue inaugurado en el marco de los festejos del Centenario. También en 2010 el Consejo Federal de Inversiones (CFI) financió el proyecto ejecutivo y, al año siguiente, los arquitectos Rodolfo Castello y Elisa Castro diseñaron un proyecto de restauración junto a otros 12 profesionales. En 2012, la Comisión Nacional de Monumento Histórico aprobó, con modificaciones, la mencionada propuesta. En el segmento entre 2013 y 2020, el gobierno provincial incluyó el proyecto en su plan de obras públicas a financiar con transferencias del Tesoro Nacional. Sin embargo, esto no generó avances significativos. Entre 2013 y 2014, la Provincia financió el reemplazo de cubiertas del Salón Auditorio por emergencia hídrica. En 2017 la Dirección Nacional de Arquitectura analizó el proyecto y profesionales de Paraná y Buenos Aires adecuaron nuevamente la propuesta a los estándares exigidos. Esas modificaciones fueron aceptadas por la Comisión Nacional de Monumento Histórico y el gobierno nacional anunció el llamado a licitación de la obra completa, pero, al año siguiente, se suspendió por recortes presupuestarios. En ese momento, filtraciones causadas por copiosas lluvias generaron la pérdida de miles de libros. En 2019, el gobierno nacional accedió a ejecutar parcialmente el proyecto para atender este problema. Se llamó a licitación, se recibieron dos ofertas, pero el proyecto finalmente no se adjudicó. En 2020 el presidente, Alberto Fernández, y el gobernador, Gustavo Bordet, anunciaron en conferencia de prensa en Paraná que el gobierno nacional ejecutaría la obra de la Biblioteca Popular.
Lo que viene
Según indicó Brizuela, la apertura de sobres será el 2 de septiembre próximo. «Entendemos que uno o dos meses después podrían comenzar las obras que tienen un plazo estipulado de 12 meses», dijo. A su vez, señaló que los trabajos previstos van a permitir «volver a usar el edificio completo después de 20 años aproximadamente en los que se está usando parcialmente, con distintos sectores inhabilitados. Esto es muy complicado, especialmente porque había una gran demanda para el uso de espacios de la Biblioteca hasta antes de la pandemia. La ciudad recuperará, de este modo, su segunda sala después del teatro 3 de Febrero. La sala cuenta con una capacidad de 250 personas sentadas y es ideal para diversas actividades de carácter cultural».
Referencias históricas
La Biblioteca Popular del Paraná fue fundada en 1873, en el marco de la ley impulsada por Domingo Faustino Sarmiento en 1870 que dio origen a la Comisión Protectora de Bibliotecas Populares con el objetivo de difundir el libro y la cultura. En aquel momento, la entidad tuvo su sede en el edificio que fuera la Sala de Diputados del Congreso Nacional de la Confederación Argentina. Luego, durante algunos años funcionó en casas de alquiler y en residencias particulares. En 1907 se llevó adelante una colecta popular para reunir fondos con el objetivo de comprar el terreno del actual edificio. Los alumnos de las escuelas de Paraná fueron grandes impulsores de esta actividad civil. Entre 1907 y 1910, con motivo del primer centenario de la Revolución de Mayo, el Estado Nacional y la Provincia de Entre Ríos se comprometieron a financiar la construcción del edificio cuyo diseño se encomendó a los arquitectos Rodolfo Fasiolo y Jacobo Pedro Storti. El gobierno provincial creó la Comisión Pro Centenario y realizó un aporte del 50% del costo de la obra. Por su parte, el gobierno nacional incluyó partidas en el presupuesto nacional pero no las ejecutó y, por lo tanto, no se recibieron los correspondientes fondos. En 1910 se inauguró el edificio y se consagró a los ideales de la Revolución de Mayo en un acto multitudinario con la presencia del gobernador, Faustino Parera, y autoridades nacionales. Un dato llamativo es que dos semanas antes de la inauguración, la institución debió hipotecar el edificio para afrontar los pagos adeudados al constructor.
En 1922, el Banco Hipotecario Nacional, beneficiario de la hipoteca, intentó el remate público del edificio por la deuda que tenía la institución. La sociedad civil respondió con otra masiva colecta destinada a «solventar las deudas que pesan sobre el edificio». Finalmente, en 1962, después de medio siglo de los aportes voluntarios de integrantes de la sociedad civil, se canceló la hipoteca con el Banco Hipotecario Nacional.
En el presente, la Biblioteca Popular del Paraná cuenta con 90 mil libros y presta el servicio de biblioteca pública de acceso libre y gratuito. Además, se realizan actividades de promoción cultural donde participan miles de personas, como la Noche de Pijamas en la Biblioteca (destinada a niños) y la Noche del Terror en la Biblioteca (destinada a adolescentes). Desde la institución informaron que el 90% de los ingresos económicos son aportes realizados por sus socios y el resto corresponde a subsidios del Estado. A su vez, muchos de los trabajos son ejecutados por voluntarios ad-honorem.
