Un entrerriano en la Escuela Documental de Santa Fe

TEXTO JUAN PABLO GAUNA

 

 

Este año se cumple el centenario del natalicio de Fernando Birri, fundador del Instituto de Cinematografía de la Universidad Nacional del Litoral (ICUNL). En el marco de tareas de preservación y producción de archivos, se redescubren nexos de las producciones de dicha institución con Entre Ríos y su idiosincrasia. Un ejemplo de ello, es el cortometraje La doma (1969), del director paranaense Patricio Coll, filmado en Federal.

En 1956 Fernando Birri creó el ICUNL con la idea de hacer cine desde una ciudad de provincia y comprometiéndose con los problemas locales. En tal sentido, desde este Instituto se emprendió la tarea de registro y denuncia de las carencias que acuciaban el horizonte fluvial de la zona. La misma, fue una experiencia universitaria pionera en Argentina, que atrajo a estudiantes de distintas latitudes, por ejemplo, de nuestra provincia.

La también llamada Escuela Documental de Santa Fe marcó una época, ya que entre los años 1956 y 1976 produjo aproximadamente 78 cortometrajes, contabilizando realizaciones propias y asociadas con otras instituciones. Esta experiencia de producción y formación movilizó al ámbito cinematográfico a replicar su modelo educativo -por ejemplo, en la Escuela Internacional de Cine y Televisión de San Antonio de Los Baños, Cuba- y a abrir camino para el Nuevo Cine Latinoamericano.

Dentro del ICUNL, el paranaense Patricio Coll tuvo una destacada participación, primero como estudiante y luego como docente. Bajo la dirección de Coll se cuentan, entre otras, las siguientes obras: La doma (1969), El entierro del gato (1973), Cicatrices (2000), y Hachero nomás (1966) en codirección con Jorge Goldenberg, Luis Zanger y Hugo Bonomo.

 

 

Filmada en la estancia “La invernada” en Federal, La doma es el cortometraje de tesis de Patricio Coll, y su guion parte de una adaptación de Don Segundo Sombra (1926) de Ricardo Güiraldes que no pudo filmarse, y que derivó en una nueva versión.

Dicho guion, fue estructurado y contempló todos los detalles para no dejar nada librado al azar, ya que Coll contó con muy poca película virgen para filmar. Justamente, para saber qué filmar estudió cómo era el proceso de doma de caballos en esa zona de Entre Ríos, y siguiendo el ideario de que el gaucho es una persona de pocas palabras, trazó un registro que no tiene narración, donde la imagen lo explica todo. Además, el cortometraje es un registro poético de las escenas de doma, y del vínculo del domador con el animal y el paisaje.

Como advierte Luis Priamo en “Racconto” (2022), publicado en el libro Instituto de Cinematografía de la Universidad Nacional del Litoral 1956-1976 (de Claudia Neil y otros]: “La doma describe el trabajo de un domador profesional sobre un potro bravo desde el momento en que lo arrean a la estancia hasta que le sacan el bozal y lo sueltan, ya manso. Su asunto es el austero elogio del oficio antiguo (…). Es sobre ese trabajo y esa relación, sobre su carácter noble, que habla la película (…)” (Priamo, 2022: 237).

Si se reconstruye el contexto original de circulación del cortometraje, se recordará que el mismo fue estrenado en el Paraninfo de la Universidad Nacional del Litoral en el marco de su 50° aniversario. Los sesenta/setenta era una época de ebullición política, y no faltaron las polémicas alrededor de esta producción, tildada de “formalista” y “elitista” por la comunidad de estudiantes del ICUNL, que adherían a una perspectiva de compromiso social, muy característica de la tradición documentalista del Instituto. No obstante esto, el trabajo de Coll representa la realidad de un trabajador rural y el vínculo con el ambiente.

 

 

Otras asociaciones entre las producciones del ICUNL y Entre Ríos, vienen dadas por los registros sobre la realidad litoraleña, común con varias provincias, a saber: la vida del pescador (Puerto piojo, Freire, 1969; Pescadores, Pussi, 1969), las vivencias de pequeños pueblos de provincia (Hoy – cine – hoy, Bonacina, 1965; Florentina, Colombo, 1969), la agricultura (Maíz, Vallejo, 1964; Reservas forrajeras, Caprio, 1964; La doma, Coll, 1969), o la realidad marginal (Los inundados, Birri, 1962).

El rescate de estos materiales, su preservación y puesta en disponibilidad fue posible gracias a un acuerdo reciente entre la Universidad Nacional del Litoral y el investigador y coleccionista Fernando Martín Peña. Esto permitió que los cortometrajes estén disponibles para su consulta en la Biblioteca Virtual UNL y en el portal Filmoteca Online.

En diálogo directo con las experiencias aquí referidas, la Temporada de Rescate realizada por el Instituto Autárquico Audiovisual de Entre Ríos (IAAER) y la Cinemateca de Entre Ríos ofreció al público revisitar la filmografía de Patricio Coll con la proyección en 16 milímetros de La doma y de El entierro del gato. La propuesta contó con la presencia del director, quien dialogó con los espectadores sobre su obra.

 

 

 

 

Si te interesa lo que hacemos, podés suscribirte a la revista o convidarnos un matecito

.

Comparte:

te puede interesar

Scroll al inicio